Christian Jamett
Fotógrafo chileno nacido en el año 1980, parte su carrera hace más de 15 años con trabajos realizados desde la vereda de la fotografía autoral. En donde el año 2002 inicia una seguidilla de registro de cuerpos pintados masivos en diferentes lugares de Chile; donde el acento era la teatralidad que representaba la desgracia de la sociedad, para luego concentrar sus esfuerzos hasta el día de hoy en la fotografía documental apuntando temas humanos, con hincapié en los grupos menos valorados por la sociedad. Ha trabajado para medios nacionales de noticias como colaborador del diario chileno “Las últimas noticias”, y colaborador de agencias internacionales como France Presse y Majority world, donde sus imágenes han sido parte de medios tales como CHICAGO TRIBUNE, CBSNEWS, CBS SAN FRANCISCO entre otras.
Desde el 2014 crea y dirige el festival internacional de fotografía www.fotoarica.com y por último lanzó su fotolibroABU (año, 2017) bajo el sello de Ediciones La Visita y que es parte de la prestigiosa colección El Rectángulo, proyecto que difunde la obra de fotógrafos chilenos.
“El trabajo de Christian Jamett sobre los descendientes de esclavos africanos que los Conquistadores trajeron con ellos a Chile, da cuenta de un acercamiento generoso y delicado para revelar a un grupo de personas poco reconocidos. Dentro de la mejor tradición de la fotografía documental, Jamett ha traído a la vida y a la atención del público, a este grupo único a menudo pasado por alto en la sociedad chilena. Sus fotografías son cálidas y sus temas están llenos de dignidad y orgullo.”
Ed Kashi
Fotógrafo Agencia VII
Sobre la muestra Afrodescendiente, más allá de África
La exposición fotográfica “Afrodescendiente más allá de África” del autor Christian Jamett, nos habla por medio de sus fotografías en gran formato, sobre la presencia ineludible del pueblo trival afrodescendiente, desarraigado de su continente original. Las imágenes dan cuenta de la presencia de sus miembros que, hasta el día de hoy, habitan las mismas zonas geográficas de sus antepasados. Ellos, a diferencia de los inmigrantes que actualmente viven en Chile y que cada vez se nos hacen mas familiares, fueron sacados a la fuerza eliminando todo tipo vínculo con sus raíces y troncos familiares. Hoy, sus descendientes, se hacen presente en esta exposición, que ya suma haber sido expuesta en el Centro Cultural de las Artes en Querétaro- México, en el Centro Cultural Palacio la Moneda en Santiago, además de ser inaugurada, en en Arica, el día 18 de Agosto de 2017. Al día siguiente será expuesta en el Centro de Ciencia, cultura y Arte de la ciudad de Joao Pessoa en Brasil. Para luego, a finales de año, ser expuesta en Tokio – Japón y Corea del Sur, vinculada con las embajadas de Chile en dichos países.
Contexto Histórico
Los primeros migrantes de raza negra llegaron a Latinoamérica como consecuencia del comercio europeo de esclavos desde África. La gran mayoría provenían de las regiones que hoy conforman Nigeria, Congo, Malí, Ghana y Senegal e ingresaron a nuestro país desde Valparaíso. En Chile, la Ley de Libertad de Vientres promovida por el patriota e intelectual Manuel de Salas y proclamada en 1811, permitió que los hijos de las esclavas africanas pudiesen nacer libres, al tiempo que liberó a cualquier esclavo que permaneciese más de seis meses en el país.
Los territorios que hoy conforman el norte de Chile, y que en ese entonces constituían la parte sur de Perú, gozaban de una población mayoritariamente de raza negra, tanto esclava como libre. Específicamente en la región de Arica se registraba un 58% de población afrodescendiente en el año 1871, constituyéndose así como la ciudad del cono sur con mayor cantidad de habitantes de raza negra. Este fenómeno se inicia en tiempos de la Conquista, cuando Arica era el principal puerto de envío de mercancías hacia Europa como plata de Potosí, y el cálido valle agrícola de Azapa, la primera zona de producción de algodón y caña de azúcar.
Con la abolición total de la esclavitud en Chile en 1823, se beneficiaron aproximadamente cinco mil personas, aunque esto no significó que las condiciones laborales o de vida mejorasen. Cuando en 1929 el territorio de Arica pasó a formar parte de Chile, gran parte de la población afrodescendiente de la zona emigró hacia Perú, producto de la intensa campaña de “chilenización” que se llevó a cabo en la región. El resto de los afrodescendientes que permanecieron en Arica enriquecieron el panorama cultural y aportaron al mestizaje tan característico de Latinoamérica.
En la actualidad, el Valle de Azapa se constituye como un importante bastión de afrodescendencia en Chile, y sus miembros se destacan por su organización activa y participativa, tanto a nivel político como difundiendo y conservando el patrimonio cultural africano.