Sally Mann

Sally Mann

Sally Mann (1951), fotógrafa norteamericana nacida en Lexington, Virginia, USA.  Se graduó con honores en el Bennington College en el año 1974 y luego alcanzó una maestría en Arte en el año 1975, en el Hollins College.  Sus estudios de fotografía los hizo en el Praestgaard Film School, 1971; en el Aegean School of Fine Arts, 1972; en el Apearon, 1973; y el Seminario Ansel Adams en Yosemite en 1973.

Su trabajo

Sally Mann ha llamado la atención no solamente por sus cualidades técnicas sino también por sus muestras sobre sexualidad durante la pubertad y la adolescencia.  Estas muestras pertenecen nada menos que a sus tres hijos: Emmett, Jessie y Virginia.  Las escenas muestran reuniones familiares, niños jugando, típicas escenas familiares o por lo menos, aparentan serlo.  Mann ha provocado controversias con estas fotografías y ha sido acusada de explotar a sus hijos, sin embargo sus fotografías dejan en claro que los niños son personas y no títeres. Estas fotografías muestran los misterios de la niñez y luego el crecimiento de los niños captados con gran belleza por su madre.

Cuando Sally Mann tenía 16 años su padre le regaló una copia del libro Historia de la Conquista de México de William H. Prescott. Ella quedó cautivada inmediatamente por el dramático pasado de esta antigua cultura altamente evolucionada y por la maravillosa belleza natural.  Por esta razón cuando “Nature Conservancy” consultó a una docena de artistas para fotografiar algunos de los “Last Great Places”, Sally Mann pensó inmediatamente en la selva de Yucatán.  Estas fotos formaron parte de una colección exhibida como “In Response to Place”, presentada en la Galería Corcoran en Septiembre de 2001.

Sully Mann se inicia como fotógrafa documental del período moderno.  Sus retratos de la familia se originan en el año 1984 cuando su hija Jessie regresó a casa con la cara hinchada por las picaduras de mosquitos.  El aspecto de la niña le provocó un deseo compulsivo de fotografiarla y este hecho motivó muchas fotografías más.

En el año 1988 trabajo en su libro “What Remains” en el cual crea meditaciones de sueños sobre muerte, recuerdos y materia en una desconectada serie de fotos.  A través del procedimiento fotográfico alcanza un proceso de decadencia al cual está indefectiblemente atado la vida.  Por ejemplo, en una de las fotos muestra a sus hijos y los restos de un perro que han desenterrado.  Considerando el trabajo anterior de Mann en sus inicios, éstas imágenes obsesionan como la famosa alegoría de Poussin, “Et in Arcadia Ego”, en la cual habla de la constante presencia de la muerte, inclusive en el paraíso.  Sally Mann es llamada “Faulkner of the lenses”.

Su técnica

Sally Mann aplica la técnica que se usaba hace 150 años, trabajando con una placa de vidrio cubierta con colodión y éter.  Se caracteriza por usar una cámara de formato grande y lo único digital que usa son sus manos.

Varios artistas americanos están experimentando con esta antigua técnica de procesar fotografías, motivando con ello la resurrección de las técnicas fotográficas eliminadas hace un siglo atrás. A pesar de que esta tendencia está inclinada hacia el trabajo manual de la tecnología antigua, está infundida de nuevas ideas y reinvención. Estos renacidos artistas victorianos usan técnicas, herramientas y métodos antiguos para registrar y manipular objetos contemporáneos de una manera nueva, fresca e individual.

En su exhibición “Mother Land”, Sally Mann yuxtapone dos secuencias fotográficas en blanco y negro, relacionadas entre sí.  Una secuencia corresponde a unas granjas ancestrales en Virginia, desprovistas de personas, insinuando la existencia humana.  Estas fotografías podrían haber sido tomadas en el siglo XIX ya que están suavemente enfocadas con una cuidadosa composición.  Lo que Sally Mann trata de mostrar no es la nostalgia sino el reconocimiento, al igual que Faulkner, de que el pasado nos puede revelar el presente.  A veces ella invierte el lente para lograr imágenes fuera de foco, asociadas con el Simbolismo francés.

Actualidad

Dejando atrás su fotos perturbadoras podemos decir que Sally Mann es una mujer de 52 años sorprendentemente alegre.  Aparentemente para ella no existe una demarcación entre el arte y la vida, la familia y la amistad.  En la actualidad, sus hijos se han ido a la universidad o al Cuerpo de Paz.  Ella vive en una granja en Shenandoah Valley con su esposo Larry, de profesión abogado y con sus perros, gatos, cabras, pájaros y caballos árabes.  Las murallas de su casa están adornadas con sus fotografías, las de Arbus y las de William Christenberry.  Su amigo Cy Twombly, escultor, nativo también de Lexington, la ha ayudado a plantar y distribuir los “Maples” a la entrada de su casa.

Reconocimiento

Una serie de retratos de familia comprendieron la publicación de su primer libro en 1992, así como también exhibiciones en el “Institute of Contemporary Art” en Filadelfia y otra en la Galería de Nueva York.  Ha publicado cinco libros, entre ellos “Mother Land” con fotografías de paisajes del sur.  Su trabajo ha sido exhibido en numerosos museos, incluyendo el Barbican en Londres; el Whitney Museum of Art Bienal, 1991; “Photo Gallery International” en Tokio; el Museo de Arte Moderno en Nueva York; y sus colecciones se encuentran en el “Smithonian Institution”, el Museo Metropolitano de Arte y otras importantes instituciones.  En julio de 2001, Sally Mann recibió de la revista Time Magazine, el premio de la Mejor Fotógrafa norteamericana.